Aquella vez, me llamo diciendo VEN, ACERCATE... y como me lo había indicado, me puse de rodillas frente a Usted, entre sus piernas. Me ha enseñado a lo largo de éste tiempo que mi única función es obedecer y complacerle, y yo gustosa lo haría... hago, haré.
Pero aquella vez, después de haber pedido me acercara, y cuestionarme a cerca de ser o no una buena puta, tomó el cigarro al que de poco a poco iba consumiendo, y lo acercó lentamente a mi piel, a la altura de las tetas... SE LLAMAN JUEGOS CON CALOR... TE GUSTA??? ... a lo que contesté con un Si...
TE VOY A MARCAR...
después de esas palabras sentí como un sudor frío recorría mi piel... y cuando nos conocimos, uno de los limites establecidos fue... No marcas permanentes... pero...
ACASO IMPORTA ESO CUANDO ERES ESCLAVA?? Claro que no... Gustosa y voluntariamente entregue mi poder de decisión... así que... cerré los ojos... y sólo sentía como se acercaba el calor a la piel... el sudor frío no cedía, e instintivamente retrocedí.
A que esclava... o sumisa le gusta hacer enojar a su Amo...???
Y las lágrimas ante la amenaza de ser marcada... comenzaron a brotar...
Así como un semblante poco agradable, comenzó a asomarse en su rostro...
NO QUIERO UNA PUTA DESOBEDIENTE...
ni yo serlo... pero el miedo... invadió mi cuerpo... y aún más el arrepentimiento por haber provocado su desprecio...
Que puedo hacer? Cómo remediar eso... Así que después de haber intentado evadir con excusas inútiles y absurdas… con lagrimas en los ojos... me dispuse a ser marcada... y ofrecí las tetas para que hiciera lo que fuera su voluntad.
NO, NO TE ACERQUES, molesto, y más que nada decepcionado, después de un rato me dijo...
RECUESTATE... TE VOY A CASTIGAR...
CUENTALOS...
Conté... 100... o más... no recuerdo bien... y lo único que escuchaba... detrás de mi llanto y gritos ahogados... era...
NO LLORES... TU, AGUANTAS MÁS QUE ÉSTO.
“Y los instintos des-atándose tras el espejo de nuestra identidad des-pedida de nuestro ser ignoto...”
Belmar
¿Por qué dejaste de escribir? Es sublime...
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